El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, rechazó este martes la política hostil de EE.UU. contra Venezuela, que busca "derrocar a su legítimo Gobierno".
"La política de las cañoneras y la desprestigiada Doctrina Monroe son parte del pasado neocolonial", agregó el mandatario en una publicación de la red social X.
En esa línea, el presidente cubano manifestó su repudio a "la injerencia, las amenazas y la agresión militar" del Gobierno estadounidense contra Caracas, que se ha intensificado en las últimas semanas con un inédito despliegue del Ejército en las aguas caribeñas.
Inaceptable la injerencia, las amenazas y la agresión militar que prepara #EEUU contra #Venezuela para derrocar a su legítimo Gobierno.La política de las cañoneras y la desprestigiada Doctrina Monroe son parte del pasado neocolonial. América Latina y el Caribe es #ZonaDePaz.
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) December 2, 2025
Díaz-Canel recalcó que América Latina y el Caribe son "una zona de paz", como lo declaró la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en 2014, por lo que ese despliegue militar va en dirección contraria a los principios que rigen a los países de la región.
La declaración del presidente cubano ocurre luego de que EE.UU. declarara "cerrado" el espacio aéreo venezolano, lo que ha sido catalogado por Caracas como "un ataque directo a la estabilidad de toda América Latina y el Caribe".
Claves de la agresión de EE.UU.
- Despliegue militar
Desde agosto pasado, EE.UU. mantiene desplegada una fuerza militar significativa frente a las costas de Venezuela, justificándola como parte de la lucha antidrogas. Washington anunció posteriormente la 'operación Lanza del Sur', con el propósito oficial de "eliminar a los narcoterroristas" del hemisferio occidental y "proteger" a EE.UU. "de las drogas que están matando" a sus ciudadanos.
Como parte de estas operaciones se han realizado bombardeos contra presuntas embarcaciones de narcotraficantes, con un saldo de decenas de personas muertas y sin pruebas de que realmente traficaran con estupefacientes.
Washington ha acusado sin sustento al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de liderar un cártel de narcotráfico y ha duplicado la recompensa por su captura.
- Postura de Venezuela
Frente a las acusaciones estadounidenses, las autoridades venezolanas han articulado una respuesta unificada que rechaza el marco de confrontación bilateral y denuncia que se trata de una campaña de agresión multilateral. Maduro calificó las acciones de Washington como una campaña de desprestigio contra su administración para "justificar cualquier cosa" contra la nación bolivariana. Afirmó que esta estrategia busca manchar la imagen de Venezuela y su revolución como pretexto para las agresiones, algo que "han hecho muchas veces".
Maduro denuncia que el objetivo real de EE.UU. es un "cambio de régimen" para apoderarse de las inmensas riquezas petroleras y gasísticas de Venezuela.
- Condena internacional
Organismos como la ONU y la propia Administración de Control de Drogas de EE.UU. (DEA) señalan que Venezuela no es una ruta principal para el narcotráfico hacia EE.UU., ya que más del 80 % de las drogas utilizan la ruta del Pacífico.
Rusia, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos y los Gobiernos de Colombia, México y Brasil han condenado las acciones estadounidenses. Expertos califican los ataques a embarcaciones como "ejecuciones sumarias" que violan el derecho internacional.


