Funcionarios clave de Estados Unidos no supieron hasta una fase avanzada de la elaboración del nuevo plan de paz para el conflicto ucraniano que ha sido anunciado esta semana, según informa Bloomberg citando a personas familiarizadas con el asunto.
Así, precisan, el secretario de Estado, Marco Rubio, no estuvo involucrado en los preparativos ni se implicó mucho trabajo interinstitucional estadounidense.
La elaboración del renovado plan fue liderada por el enviado especial de la Casa Blanca Steve Witkoff y el enviado especial de la Presidencia rusa para inversiones y cooperación económica internacional, Kiril Dmítriev, añadieron las fuentes.
El jueves se publicaron los 28 puntos del plan de paz del presidente Trump para el conflicto ucraniano, ampliamente discutidos en los medios desde hace varios días.
Estos incluyen la no expansión de la OTAN, el levantamiento gradual de las sanciones impuestas a Rusia y la celebración de elecciones presidenciales en Ucrania 100 días después de que el documento entre en vigor, así como cuestiones territoriales y la reducción del Ejército ucraniano.
Sin embargo, numerosos informes indican que los principales socios europeos de Ucrania se alinearon con el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, para rechazar puntos clave del plan de paz.


