El Ministerio de Defensa del Reino Unido confirmó que algunos tripulantes de sus vehículos blindados de nueva generación 'Ajax' se han visto obligados a acudir a hospitales a causa de malestares originados por los ruidos y vibraciones emitidas por esas unidades, informa Sky News este viernes.
Se trata de personal que habría participado este verano en las pruebas de tres de esos vehículos de combate, un modelo que se pretende exportar con precios que rondarían los 10 millones de libras por unidad (aproximadamente 13 millones de dólares).
Autoridades británicas han asegurado que los usuarios afectados son solo un "pequeño grupo" y que no pondrían en manos de sus fuerzas armadas nada que no "fuera seguro".
"La seguridad de nuestro personal es una prioridad absoluta. El 'Ajax' ha sido sometido a rigurosas pruebas y a un proceso de seguridad garantizado, y los exámenes demuestran que su funcionamiento es seguro", indicó uno de los portavoces del citado ministerio.
"Las inquietudes que surgieron durante el verano fueron investigadas por un equipo de seguridad y no se encontraron problemas sistémicos. Todos los vehículos blindados producen ruido y vibraciones, pero seguimos velando por que no superen los límites legales", agregó.
De acuerdo con reportes citados por el diario, una revisión interna realizada en 2021 había ya mostrado a los mandos militares británicos los distintos efectos de los 'Ajax' en su personal, por lo cual habrían decidido poner en marcha un plan para remediar las consecuencias de su operación.


