El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, no testificará en su juicio por corrupción programado para el lunes y martes tras sufrir una intoxicación alimentaria y se recupera en casa los próximos días.
Según un comunicado de su Oficina, luego de sentirse enfermo durante la noche, Netanyahu faltó el domingo a la reunión semanal del Gabinete. El médico que lo atendió lo diagnosticó con una inflamación intestinal como consecuencia de comer alimentos en mal estado. Sin embargo, su condición fue declarada como buena.
La Fiscalía del Estado aceptó posponer las dos audiencias programadas después de revisar su historial médico, pero solicitó su comparecencia el miércoles y jueves debido a las "numerosas audiencias canceladas", recoge The Times of Israel.
